15 de agosto de 2010

Cuando regreses

Cuando regreses te voy a estar esperando con los brazos abiertos y me voy a sentir completa de nuevo. Entonces te voy a preguntar cómo te fue y las cosas que hiciste, y prestaré toda mi atención para no perderme de ninguno de tus gestos, caras y expresiones, así como de tus palabras y tu vocecita de ratoncito. Cuando regreses te voy a abrazar y te voy a dar un gran beso, aunque al final me empujes porque te asfixio, como siempre. Vamos a ver tele, porque las caricaturas son más divertidas contigo, y nos vamos a reir mucho y a dejar que Hermione se nos acueste en la panza ronroneando. Cuando regreses voy a preparar tu merienda, y probablemente para ese día ya habré comprado Nutella para tu pan. Seguramente te voy a regañar porque no te quieres ir a dormir, pero finalmente me harás caso. Te voy a acompañar, nos vamos a poner la pijama y voy a leerte el libro que quieras. Dejaremos que Hermione se acueste con nosotras y te caliente los pies. Y cuando te quedes dormida me voy a quedar a observar como tu cara va relajándose y va haciendo esos gestos chistosos que me hacen reir.

Ya quiero que vuelvas. Es demasiado silencio y Hermione está aburrida. Y hoy, como cada vez que te vas, te extraño mucho.