27 de junio de 2009

Actualizaré, porque me lo pide mi hermana, porque esto lleva varias semanas de abandono y porque sí.

ADVERTENCIA: El siguiente texto es puramente autobiográfico y contiene temas de diversa índole, todo lo cual puede ser realmente aburrido, por algo bautizé a mi blog como intrascendente. Si después de esta advertencia ud. se aventura en el texto, será bajo su propio riesgo. No nos hacemos responsables de su somnolencia, ni damos Coca ni cafiaspirinas.
Crónica de eventos (que no son afortunados ni desafortunados)
1. No he actualizado porque no he querido. Porque he sentido que no tenía nada que contar. Así que decidí hacer el blog a un ladito por un período. Ah, también el exceso de trabajo y las miles de charlas por messenger no me han permitido siquiera pensar qué carajos escribir en este tugurio.
2. Hace dos días empezaron a arreglar mi calle. Resuuuuulta, que decidieron quitar tooodo el pavimento, con unas máquinas enormes cuyo nombre no sé, pero que dan miedito, y me hacen pensar en los transformers de mis tiempos. Así que ahora hay un río de lodo frente a mi casa. No hay manera de cruzar la calle, así como lo hace la gente normal, no; ahora debo llegar hasta la esquina y ahí buscar un lugar que no esté muy encharcado para poder cruzar. Porque han de saber que yo, mujer ocupada y "práctica", llevo mi ropa a la lavandería y resulta que esta se encuentra en la acera de enfrente. Debo haberme visto patética: dos bolsas enormes de ropa, lluvia, un paraguas medio maltrecho por un berrinche que hice, las llaves en la mano y brincando de charco en charco.
Hoy en la mañana apareció un auto ahí varado en el camino, metido en el lodo y abandonado. El cuadro era deprimente. Luego me enteré de la historia, que tal vez otro día cuente.
3. Un Adán, con intenciones de que yo sea su Eva, creyó que al fin estaba dando mi bracito a torcer. ¡Error! No tengo intención de empezar una relación, sea con él o con otra persona. Mi capacidad de amar, querer o como se llame a éso, está en estado de hibernación, y lleva así un buen rato y así seguirá por otro rato, aún no sé por cuánto más. Sucede que Adán, sir Zodiaco, al haber entendido las cosas chuecas y retorcidas, me puso en un dilema y todo terminó mal. Como siempre, lo diferente ahora es que no me dió remordimiento, creo que ahora sí soy un maldito hielo.
4. Se desapareció uno de mis amigos. No fué a trabajar, así nomás. Tampoco contestaba llamadas ni mensajes. Simplemente la tierra se lo tragó. Me dió miedo. Había estado muy deprimido y preocupado. Me dolió la panza. Pensé lo peor, porque alguna vez me dió a entender que estaba de sobra en este mundo. Desde el viernes en la mañana le estuve enviando mensajes, le mandé un mail, le marqué a su celular y nada. Hoy al fin... mientras escribía esto me llamó por teléfono. Una llamada escueta en la que sólo me dijo que estaba bien, que luego me llamaba para contarme. No lo sé... Tal vez no lo haga... tal vez sí... Al menos, ya me siento un poco más tranquila.
5. Ayer cayó una tromba. Salí de trabajar a eso de las 7.30 de la noche y la calle estaba inundada. Para mi mala suerte, ése día se me ocurrió cargar con tres mochilas llenas y muy pesadas. Los taxis no se detenían, los autos pasaban rápido con intención de bañarme de lodo y comenzó a llover de nuevo. No podía cruzar la calle porque no podía brincar el río de lodo con tanto peso. Esperé como 45 minutos a que se detuviera un taxi, mientras del lado contrario de la calle pasaban muchos y no me veían o se hacían los desentendidos. Al fin, cuando la corriente bajó un poco, crucé. Y al fiiiin, un taxi se detuvo. Me preguntó mi destino. Y cuando lo supo, se rehusó a llevarme. Afortunadamente estaba yo afuera de una plaza comercial, así que me metí a sentarme y descansar. Saqué mi teléfono, tenía seis llamadas perdidas de mi madre, que por casualidad andaba por los mismos rumbos, atorada en el tráfico. Me pidió que no me moviera de donde estaba y la esperara, que era mejor que estuvieramos acompañadas ya que ella tampoco podía llegar a su destino. Y justo cuando colgué con ella, murió mi teléfono. Pasaron 45 minutos y yo esperando, fumando para matar el tiempo, dando vueltas como león enjaulado y con los pies congelados. Al fin llegó. Como no sabíamos qué hacer, pues nos metimos al cine. Y al salir, como a eso de las 11.45 de la noche, la calle estaba libre y ya no estaba inundada, como si nada hubiera pasado. Ah, y la película fue un bodrio de melodrama mal contado.
6. Una de mis mejores amigas se está alejando de mi. Dice que soy una histérica amargada y que ella no puede ayudarme con éso y que prefiere alejarse. Dice que contesto feo y que hago malos modos. Siento que siempre he sido así. No soy la de los mejores modales. Pero tampoco me gusta que me digan, cada vez que me ven, lo mal que me veo. Que me analicen todo el tiempo. Que crean que tengo resentimientos contra mi madre porque alguna vez conté que cuando yo era niña era muy estricta. Que estoy amargada y que necesito una pareja que me quiera. Que estoy loca si no quiero hacer mi vida con alguien. Que soy demasiado joven para todas las responsabilidades que tengo. Que me compre un carro. Que me compre una casa. Que me vaya de vacaciones. Que no sea tan dura con la hermosa Blue. Que soy una mamona porque me sabía unas preguntas sobre la vida de Cristo, las cuales son simple cultura general. Que estoy resentida contra el mundo y que vivo enojada con todo lo que me rodea. A ver, si sólo recibo comentarios negativos sobre mi persona, no voy a contestar con una sonrisa o un "gracias". ¡Nooooo! Me enoja, me molesta que me marquen tooodos mis defectos y aparte, que lo hagan diario. Sí, me siento cansada físicamente. Creo que no he dormido bien. Creo que no organizo mi tiempo efectivamente. Soy un desastre y por eso termino haciendo más trabajo del necesario. Pero de éso, a que me estén jodiendo todo el tiempo con que soy una pinche amargada....
Si llegaron vivos al final de esta reseña, sin haber caído en estado de narcolepsia, avísenme.
Nota: Ahora no incluyo fotos porque la cámara y la máquina no son compatibles, ni con terapia.

13 de junio de 2009

3 de junio de 2009

I wish I could understand, Mr Einstein.

I'm not an atheist. I don't think I can call myself a pantheist. The problem involved is too vast for our limited minds. We are in the position of a little child entering a huge library filled with books in many languages. The child knows someone must have written those books. It does not know how. It does not understand the languages in which they are written. The child dimly suspects a mysterious order in the arrangement of the books but doesn't know what it is. That, it seems to me, is the attitude of even the most intelligent human being toward God. We see the universe marvelously arranged and obeying certain laws but only dimly understand these laws.


Dear Mr Einstein,

Please enlighten me tomorrow to be able to explain your Theory Of Relativity to young minds.

Yours sincerely,

I.

2 de junio de 2009

¡¡¡IGNORANTE!!!

Hoy descubrí que ignorante es la persona que no sabe que, según, Dream on es de los Beatles (sí, cómo no), que Hotel California fue escrito en un hotel en Baja California, cosa que según Don Henley desmiente, y que el nombre de Smells Like Teen Spirit viene del desodorante de Courtney Love (¡ajá!). Me dijeron que me ilustrara y que aprendiera ese tipo de datos TAN importantes para la vida de cualquier persona que se presuma rocker. ¡Ja! ¡Me burlo! A mi qué carajos me importa...

Nota: No debo entablar amistades con personas que se rigen según los astros y toman decisiones de acuerdo a lo que los ángeles les dicen o que ven fantasmas hasta en la sopa de estrellitas y pipirín. A mi me gusta la gente simple, no la que se complica la existencia de esa manera. ¡Qué fastidio!


(Esta es sólo una nota para acordarme de lo que no debo hacer.)